"DESIGUALDAD, dos caras de la misma moneda que es la vida"

Día tras día nos deberíamos de dar cuenta que somos muy afortunados en este mundo en el que vivimos, ya que en cierto modo no nos falta nada, lejos de caprichos y cosas sin importancia. A veces no nos damos cuenta de ello y nos quejamos por algo que queremos y no tenemos, pero que no es necesario. 

Si nos detenemos y miramos mas allá de lo que vemos diariamente podemos observar que en todas las partes del mundo existen núcleos de pobreza, compuestos por adultos y millones de niños que posiblemente, muchos de ellos por falta de recursos no lleguen a una edad avanzada o simplemente carezcan  de medios para tener una vida digna y acomodada.

Imaginaros que somos nosotros los que nos encontramos en su situación.

¿Como os sentiríais si pasarais solo 1 mes sin todas las comodidades que tenemos en los países desarrollados actualmente? Todo ello conllevaría dejar atrás móviles, ordenadores, la televisión o algo tan simple como una estufa donde calentarnos. Creo que mas de uno y mas de dos no aguantaría y lo dejaría enseguida.

Es por ello por lo que a veces tendríamos que detenernos para recapacitar en la situación en la que viven, concienciarnos con ellos e intentar ayudar en la medida de lo posible a este sector de la población.